Guerrero, atrapado entre “Otis” y crimen organizado

• Pese postura oficial, en redes sociales trascienden cifras de 120 decesos y 48 personas desaparecidas.

Acapulco.- El estado de Guerrero enfrenta una situación crítica tras el paso del huracán “Otis” y la violencia del crimen organizado. A pesar de que las autoridades contaban con hasta 20 horas de anticipación para tomar medidas preventivas, la negligencia fue evidente.

Las cifras oficiales reportan 27 muertes y 4 desaparecidos, pero se estima que los números siguen aumentando.

El presidente Andrés Manuel López Obrador y la gobernadora Evelyn Salgado han sido criticados por su falta de respuesta efectiva ante la crisis. Mientras tanto, miles de turistas se encuentran varados en la zona y la población sufre los estragos de la violencia y la corrupción institucional.

A pesar de que la información sobre 120 muertos y 48 desaparecidos no ha sido corroborada por las autoridades, se sabe que el estado de Guerrero vive días de muertes, miedo y zozobra. La disputa territorial entre seis cárteles terroristas y unas 500 células del crimen organizado ha generado una situación de violencia extrema.

Es necesario que las autoridades tomen medidas efectivas para proteger a la población afectada por el huracán “Otis” y la violencia del crimen organizado en Guerrero.

Cabe señalar que en las últimas horas se han viralizado en Redes Sociales diversos vídeos donde se puede apreciar a pobladores saquear establecimientos comerciales a fin de obtener tanto víveres como otros artículos que no son consideraros de primera necesidad, entre los que destacan televisores.

Asimismo, fue señalado que estos saqueos se han extendido a cajeros automáticos y diverso condóminos en los que se presume habita población de clase media-alta y alta.

Es importante mencionar que estos actos han provocado una muy marcada división de opiniones entre los usuarios de las plataformas. Por una parte están aquellos que reprueban estos actos puntualizando que no hay justificación. De lado contrario, están aquellos que apoyan los saqueos y los justifican al decir que las autoridades no están viendo por los damnificados.

Aunado a esta situación de desastre, hay alrededor de 50 mil turistas atrapados en Acapulco, mismos que esperan a que las autoridades les ayuden a regresar a sus hogares. Manuel Negrete, presidente del Fideicomiso de Promoción Turística de Acapulco, ha señalado que la situación actual representa un desafío para la industria turística local.