Ocho de cada 10 adultos de entre 50 y 60 años solo tienen 10 de sus dientes.
SLP.- El aislamiento que la acompaña ha generado un mayor descuido en otra área que ya representaba un problema de salud en México: la salud bucodental, pues de acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), 9 de cada 10 mexicanos presenta caries o alguna enfermedad de las encías como periodontitis o enfermedad periodontal.
Las principales alteraciones odontológicas de México y el mundo son la caries dental y los problemas de la encía, mismos que han aumentado durante la pandemia por el mayor consumo de carbohidratos, azúcares y la mala higiene.
“Además, el constante estrés, el miedo e incertidumbre que hemos vivido durante la pandemia han causado un aumento evidente en los casos de bruxismo, tanto en niños como en adultos, es decir, el rechinar, apretar o crujir los dientes ya sea de manera consciente o inconsciente, lo que con el paso del tiempo genera desgaste prematuro de los dientes y dolor en los músculos de la cara”, comenta la especialista.
el cubrebocas no propicia alguna enfermedad específica, su uso constante ha hecho que muchas personas noten que tienen halitosis (mal aliento), lo que los ha llevado a tratarlo con un experto.
Es importante recordar que los cubrebocas no deben de usarse más de un día, ya que la saliva deteriora la calidad de la filtración del aire y, por lo tanto, la protección que brindan
Es importante acudir de preferencia cada tres meses o una vez al año al odontólogo, pues en cada visita podrá identificar si requieres una intervención sencilla, como limpieza dental, si hay caries que tratar o la presencia de alguna otra alteración como problemas de oclusión, bruxismo e incluso, evaluará la presencia de lesiones en boca que podrían sugerir la presencia de enfermedades mayores como cáncer, lupus, liquen plano oral, entre otros.
Costo: Aunque depende de muchos factores, en promedio, una consulta básica puede comenzar desde $200, mientras que una consulta con especialistas tiene un costo aproximado de $1,000 en la primera ocasión.
Aunque lo ideal es cepillarse los dientes después de cada alimento, cuando esto no es posible es recomendable tomar agua al finalizar la ingesta, ya que el agua nivela el pH de la boca. Así, hidratarse luego de consumir algo ácido, dulce o muchos carbohidratos, estabilizará el pH bucal y evitará los procesos cariosos.
Un cepillo va desde los $40 hasta los $150, dependiendo de la marca. Debemos considerar que el cepillo debe cambiarse a los tres meses de uso o después de tener alguna infección respiratoria como resfriado común, faringitis bacteriana o covid-19.
Por: Luis de Regil