Lógica de programas sociales es acertada pero necesitan replantearse, pronuncia la COPARMEX.
SLP.- Una contracción económica de 8.5 por ciento ha registrado el país a consecuencia de la pandemia por COVID-19, con impacto en el empleo formal, horas trabajadas e ingresos laborales.
Tan solo de 2018 a 2020 la población en situación de pobreza pasó de 41.9 a 43.9 por ciento.
En términos de carencia social, el cambio de 2018 a 2020 fue de 12 puntos porcentuales.
La mitad de los indicadores de carencias sociales empeoraron.
Actualmente, 70 por ciento de la población que nace en los dos quintiles socioeconómicos más bajos permanece ahí.
Es decir, si se nace pobre es muy probable permanecer así el resto de los días.
En este sentido, la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) sentencia que los programas como Jóvenes Construyendo el Futuro, Becas para el Bienestar Benito Juárez -entre otros- tienen una lógica acertada de justicia social pero deben rediseñarse, tener reglas de operación claras, padrones confiables y mecanismos de contraloría social que abonen a la transparencia.
El sindicato patronal propone que en lugar de que los programas sociales impliquen una entrega directa de dinero, se tenga el objetivo verdadero de que las personas y familias salgan de su condición de pobreza.
A partir de un Modelo de Desarrollo Inclusivo plantea la COPARMEX que se cambie el modelo de reparto de subsidios generales por una aplicación focalizada de los programas sociales.
También retomar el concepto que considera que una persona está en situación de pobreza cuando tiene un ingreso menor a la línea de bienestar.
Asimismo poner fin a la brecha de género, garantizar que los empleos a los que acceden las personas que requieren atención prioritaria -como la población indígena- cuenten con seguridad social.
Adicionalmente establecer una política de fomento al emprendimiento, avanzar en la construcción de un sistema universal de protección social con la asignación de un presupuesto igualitario; y establecer un esquema de transferencia monetaria de emergencia para las personas que pierden su medio de sustento.
Por: Paulina Rodríguez