Crece temor en Estados Unidos, al estar al borde de la estanflación.
EUA.- La estanflación es la copa más amarga de la economía: la alta inflación combinada con una baja oferta de empleos provoca una infusión tóxica que le quema la boca al consumidor y desconcierta al economista.
Durante décadas la mayoría de los economistas pensaban que semejante mezcla ni siquiera era posible y daban por sentado que la alta inflación acompañaba a una economía fuerte y de bajo desempleo
Esta semana, el Banco Mundial evocó el espectro de la estanflación al rebajar sus pronósticos para la economía global.
“La economía global está nuevamente en peligro”, advirtió el BM, “Esta vez enfrenta simultáneamente la alta inflación y el crecimiento lento, fenómeno que el mundo no veía desde los años de 1970”.
El mes pasado, la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, usó el término en declaraciones a la prensa: “La perspectiva económica global”, dijo Yellen, “es grave e incierta, el aumento de los precios de los alimentos y la energía tiene efectos estanflacionarios al deprimir la producción y el gasto y elevar la inflación en todo el mundo”.
La guerra de Rusia contra Ucrania han provocado los mayores aumentos de los precios de consumo de las últimas décadas.
La tarea es difícil, el miedo generalizado, que se refleja en la caída de los precios de las acciones, es que el Sistema de Reserva Federal, con sus errores de cálculo, golpeará la economía sin darle un puñetazo de nocaut a la inflación.
El expresidente de la Fed Ben Bernanke dijo que “la inflación sigue siendo demasiado alta, pero está bajando, así que podría venir un periodo de un año o dos en que el crecimiento es bajo, el desempleo crece al menos un poco y la inflación sigue siendo alta”, y en resumen dijo, “podrían llamarlo estanflación”.
Por: Luis de Regil