Rojo, de pollo verde o azúcar… ¿Le tocó pagar los tamales el Día de la Candelaria? Los sabores tradicionales se han transformado para todos los gustos
SLP.- El pasado domingo, en México, se conmemoró el Día de la Candelaria, la cual no solo es una fecha marcada en el calendario religioso, también fue un día de celebración en torno a la gastronomía, especialmente con uno de sus platillos más queridos: los tamales.
El tamal es un símbolo de la cocina mexicana y un alimento que forma parte de la identidad del país.
Esta tradición ha evolucionado, por lo que fue posible disfrutar de una gran variedad, desde los clásicos hasta propuestas innovadoras y gourmet.
Aunque los sabores tradicionales como pollo, lomo, rajas o picadillo se posicionaron entre los más populares, el arte culinario se vio desbordado de una explosión de creatividad con la aparición de versiones que transformaron a este alimento en una nueva experiencia para el paladar.
Una de las personas que innovó en su contenido fue la señora Carmen Palomares quien desde hace años se dedica a comercializarlos y que, gracias a sus hijos, incorporó distintos matices de sabor.
La zarzamora, con su toque dulce y ácido, combina perfectamente con la suavidad de la masa del maíz, así como el que se encuentra hecho a base de un pastelito, de una reconocida marca, que es un homenaje a la infancia mexicana con su mezcla de nostalgia en cada bocado.
La implementación de estos tamales, junto con los convencionales, se convirtieron en los más solicitados durante la fecha.
Estos platillos no solo enriquecen el panorama gastronómico, también reafirman la capacidad de la cocina mexicana para adaptarse y evolucionar sin perder su esencia.
Por: Sofia Mayela Mata