Parteaguas, desafíos y carga simbólica, marcan el primer gobierno federal encabezado por una mujer: Claudia Corichi
SLP.- Desde la colectiva 50+1 se reconoció el gobierno de la presidenta, Claudia Sheinbaum, como un parteaguas histórico para las mujeres mexicanas.
Fue la presidenta nacional, Claudia Corichi, quien habló sobre la carga simbólica y los desafíos a los que se enfrenta en el contexto nacional e internacional.
“Ha sido un reto enorme para la presidenta, nuestra primera presidenta mujer, ha estado cargado de simbolismos su presidencia, empezando por el día que tomó protesta donde dijo que soy presidenta con a, el lenguaje importa porque nombrar a las mujeres es muy importante”, señaló.
Comentó que la mandataria ha impulsado una visión incluyente sobre el papel de las mujeres en la vida pública, alentando a eliminar prejuicios asociados con la edad y la participación femenina.
“Tenemos que perderle el miedo a decir que hemos cumplido años, decía que tenemos que dejar de estigmatizar la palabra viejas y decir que las mujeres con una edad madura realmente tienen que sentirse y ser reconocidas y valiosas”, expresó.
También destacó la capacidad de la presidenta para manejar un escenario internacional adverso, especialmente frente al actual gobierno de Estados Unidos.
“Creo que le ha tocado un reto muy duro, le han tocado tiempos nada fáciles, le ha tocado un presidente vecino de la principal potencia de esta región y de este continente que actúa con una visión que como nosotros decimos: gobierna con un estilo muy machista, muy violento y sin embargo, ha actuado con enormes templos e inteligencia, qué es algo que reconocemos más allá de posiciones políticas», indicó.
Corichi afirmó que la expectativa hacia el actual gobierno es que la sensibilidad y la visión de la presidenta se traduzcan en políticas públicas efectivas para las mujeres, niñas y niños del país.
“Abonamos a su enorme sensibilidad ya que esta sensibilidad se vea reflejada en mejores condiciones de vida para las mujeres y el respeto a los derechos humanos de todas las mujeres y de las niñas y niños que habían sido durante muchos años los grandes olvidados», terminó.
Por: José Luis Vázquez