por México, Canadá y China entre los beneficiados por fallo contra aranceles de Trump
EUA.- El reciente fallo de la Corte de Comercio Internacional de Nueva York que anula la mayoría de los aranceles impuestos por el presidente Donald Trump marca un hito clave para el comercio global, particularmente en América Latina.
La decisión brinda un respiro a varios países, que enfrentaban un gravamen del 10% y la constante amenaza de sanciones económicas desde el regreso de Trump a la Casa Blanca.
El tribunal determinó que la Ley de Emergencia Económica Internacional (IEEPA) de 1977 no faculta al presidente para imponer aranceles sin la aprobación del Congreso. Por ello, la administración Trump tiene un plazo de 10 días para retirar dichos impuestos, lo que podría allanar el camino hacia un entorno comercial menos hostil.
No obstante, el fallo no elimina todos los aranceles. Siguen vigentes los impuestos sobre automóviles, autopartes, aluminio y acero, sectores clave para países como México, cuyo sector automotriz es crucial en sus exportaciones a Estados Unidos.
La resolución también añade incertidumbre a las actuales negociaciones comerciales. Durante la pausa arancelaria de 90 días, muchos países podrían replantear su disposición a negociar con Washington, al disminuir los incentivos para aceptar condiciones desfavorables. A pesar de contar con un trato fiscal más benigno, los países latinoamericanos han estado sometidos a una fuerte presión económica.
En los últimos meses, Trump había conseguido concesiones a través de esa estrategia de presión: México aumentó el despliegue militar en su frontera, Colombia aceptó vuelos de deportados y Panamá reforzó la presencia de empresas estadounidenses en su canal.
La revocación de los aranceles plantea nuevas dudas: no se ha definido si habrá reembolsos para importadores que ya pagaron los impuestos ni qué ocurrirá con las mercancías en tránsito. Además, el Gobierno de EUA ya apeló el fallo, lo que podría llevar el caso hasta la Corte Suprema.
Pese al revés, el Ejecutivo estadounidense aún cuenta con herramientas legales. Podría recurrir a la Ley de Comercio de 1974, que le permite imponer nuevos aranceles, de hasta el 15%, en caso de déficit comercial, lo que mantiene abierto el escenario para nuevas tensiones económicas en los próximos meses.
