EUA evalúa endurecer medidas contra cárteles de droga
EUA.- El gobierno de Donald Trump considera designar como organizaciones terroristas extranjeras a más de siete grupos criminales con origen en América Latina, según funcionarios estadounidenses. Esta medida, impulsada por el Departamento de Estado, responde a una orden ejecutiva firmada el 20 de enero, que busca intensificar la lucha contra los cárteles de la droga, considerados una amenaza a la seguridad nacional mayor que el crimen organizado tradicional.
Se prevé que la designación incluya al menos ocho grupos, aunque la lista podría cambiar antes del anuncio oficial. De concretarse, la medida permitiría imponer sanciones económicas severas a estos grupos y a cualquier entidad que los apoye. Entre los cárteles mencionados figuran el Cártel de Sinaloa, el Cártel Jalisco Nueva Generación, el Cártel del Noreste, la Familia Michoacana y Cárteles Unidos. También se menciona al Clan del Golfo, un grupo colombiano vinculado al tráfico de cocaína y migrantes junto con los cárteles mexicanos.
La inclusión del Clan del Golfo obedece a su participación en el tráfico de migrantes a través del Tapón del Darién, donde cobra tarifas a quienes buscan llegar a Estados Unidos. La lista debía completarse la semana pasada, pero su publicación se retrasó debido a la ampliación del número de grupos y el debate sobre la inclusión de organizaciones ligadas a la migración ilegal.
Los cárteles mexicanos, especialmente el de Sinaloa y el Jalisco Nueva Generación, controlan el tráfico de fentanilo hacia EUA, lo que ha agravado la crisis de adicción en el país. La posible designación de estos grupos como terroristas también busca frenar su influencia en la migración ilegal y la violencia transnacional.
Las autoridades mexicanas han intentado negociar con el gobierno de Trump para evitar esta categorización, pero la presión en Washington continúa. En este contexto, el secretario de Estado, Marco Rubio, ha subrayado la urgencia de desmantelar a los cárteles, asegurando que amplias zonas de México están bajo su control, lo que representa un riesgo para la seguridad nacional de EUA