Con la entrega de juguetes, de alegría se llenaron infantes de diversas comunidades y zonas urbanas en el estado
- Gracias a cada persona que se sumó a la Colecta Anual de Canal 7.
SLP.- Con el apoyo de la ciudadanía potosina, Canal 7 realizó su esperada entrega de juguetes, una actividad que año con año ilumina los corazones de las infancias en diferentes comunidades y colonias.
Al salir de la zona metropolitana, una extensa neblina envolvió el trayecto y, poco a poco, la pavimentación comenzó a desvanecerse, lo cual dejó atrás los últimos vestigios de urbanización.
La tierra invadió la superficie, las casas desaparecieron en el horizonte y fueron reemplazadas por una extensión de maleza, cactus y fauna silvestre que surgió como recordatorio de que el ser humano cedió terreno ante la naturaleza.
Las montañas se alzaron alrededor, como gigantes silenciosos que parecían resguardar a los habitantes de La Amapola, una comunidad cercana al municipio de Villa de Arriaga.
En un lugar donde las condiciones de vida parecen haberse detenido en el tiempo, la presencia de los infantes llenó de alegría el espacio, con sus rostros expectantes por recibir un obsequio y jugar con ellos.
Kilómetros más adelante, en la comunidad de San Sebastián, inundaba el característico olor a tierra y hierba fresca, mientras los caballos pastaban tranquilamente.
Las casas de adobe, que vestían el paisaje, son el refugio de las familias que, desde generaciones, han habitado este rincón rural.
El clima gélido no impidió que las infancias del sitio se mostraran emocionados y contentos de obtener un regalo.
Los padres de familia, también, se unieron a la labor, con lo cual la entrega de juguetes se convirtió en un acto de alegría compartida.
De regreso a la urbanidad, aguardaba la colonia Luis Córdova Reyes, la cual enfrenta desafíos relacionados a la infraestructura vial y los servicios básicos. Al lugar arribaron personas de zonas aledañas como Los Magueyes.
La congregación de infantes, de diversas edades, brindó un momento de regocijo donde el sentimiento de felicidad era evidente, dado que recibían con entusiasmo, carritos, muñecas, pelotas y otro tipo de objetos que les permitirán crear memorias de diversión, así como de esparcimiento.
El recorrido continuó en los asentamientos de Peñasco, donde las casas a medio construir y, otras, hechas de madera, persisten en el espacio.
Un gesto de solidaridad ofreció gozo a las infancias, donde a pesar de las clemencias climatológicas, el bullicio de las voces infantiles se convirtió en una muestra de esperanza por parte de las familias.
La alegría se desbordaba en cada sonrisa, mientras tomaban entre sus manos las figuras de diversión.
El frío y la lluvia no impidieron llegar hacía la zona de transferencia situada en Peñasco a brindar presentes a las personas que llevan acabo sus actividades.
La recolecta y entrega de juguetes se consolidó como un acto de apoyo en el que la población potosina demostró que, con un gesto, se pueden cambiar realidades.
Este esfuerzo colectivo se convirtió en un testimonio de la bondad y compromiso de los potosinos que, con su contribución, lograron crear un momento especial para los infantes de diferentes partes del estado.
Por: Sofia Mayela Mata