Protesta en el Parlamento iraquí aumenta presiones al gobierno
- Diputados aliados del religioso Moqtada Sadr se manifestaron para exigir que «se respondan las peticiones» del pueblo
Iraq.- El gobierno de Iraq enfrentaba desde el sábado un sensible aumento de las presiones ante la protesta iniciada en el Parlamento por legisladores próximos al influyente religioso Moqtada Sadr, en medio de masivas manifestaciones que ya dejaron más de 60 personas muertas.
Al menos 63 personas murieron en las últimas 48 horas en Bagdad y en el sur de Iraq, en manifestaciones para reclamar «la caída del régimen» y en ataques contra sedes de partidos políticos, de autoridades y grupos armados.
Según la Comisión Gubernamental de Derechos Humanos, la mayoría de los muertos se registraron en las provincias de Missane y Zi Qar (sur).
La protesta, inédita por su carácter espontáneo, tuvo dos episodios. El primero, entre el 1 y el 6 de octubre, se saldó oficialmente con 157 muertos, casi todos manifestantes.
El segundo, iniciado el jueves por la noche después de una interrupción de 18 días, mientras se produjo la más importante peregrinación chiita, ha causado hasta ahora más de 63 muertos, según la Comisión.
La situación se agravó en la noche del sábado con la decisión de diputados aliados del religioso chiita Sadr de iniciar una sentada en el Parlamento hasta que «se respondan las peticiones» de los manifestantes.
«La marcha por las reformas» había ganado las elecciones legislativas en mayo de 2018, logrando 54 escaños, haciendo que Moqtada Sadr formara la coalición gubernamental, actualmente blanco de las protestas.
El sábado por la noche, «La marcha por las reformas» ha «presentado una petición oficial al presidente de la República» que, según la Constitución iraquí, puede solicitar al Parlamento que vote una moción de desconfianza al primer ministro Adel Abdel Mahdi.