Pepe Arévalo evoca sus glorias en recorrido por la colonia Roma
México.- Con la mirada fija y llena de emoción, sin ocultar su felicidad, el pianista y músico mexicano Pepe Arévalo se reencontró con su pasado de manera fugaz al acudir en la Ciudad de México al predio donde alguna vez estuvo su centro de espectáculos El Gran León, hoy convertido en mercado gourmet en la colonia Roma.
Con dificultad para hablar de manera fluida a consecuencia de la embolia que por algún tiempo lo retiró de la música y lo obligó a vender su negocio, recuerda que este foro de Querétaro 225 abrió sus puertas a las grandes orquestas y sonoras cubanas.
“Esto fue un gran foro que vio bailar a embajadores, gobernadores, periodistas y todo tipo de gente; un foro en el que se rodaron películas, incluso hice más cintas que canciones. Se lo compré al Charro Avitia, me lo traspasó y marqué parte de mi historia y del folclor urbano del entonces Distrito Federal”.
Agradece que el sitio, que fue considerado la Catedral de la Salsa, lo hayan inaugurado los periodistas Lourdes Guerrero y Guillermo Ochoa, quienes lo bautizaron como El Gran León, donde tocaron los mejores artistas del mundo, como Enrique Jorrín con la Orquesta Aragón.
El fundador del grupo Pepe Arévalo y sus Mulatos, con el que hizo época, menciona que en este sitio llegó a tomarse fotos con Celia Cruz, Enrique Jorrín, la Orquesta de Luis Arcaraz y muchos otros exponentes.
“Ha cambiado todo, al grado de que incluso ya no existe la vida nocturna en la Ciudad de México, cuando antes había cabarets de todos los tipos y para todos los bolsillos”, asegura.
“Hay fotos memorables que me llenan de recuerdos y nostalgia, pero sobre todo de inmensa felicidad, por lo que he logrado a través de la música, porque por ella viajé por todo el mundo y canté lo mismo para la realeza que para plebeyos; por la música soy lo que soy y tengo a mis hijos, la música es y será todo para mí».
«No puedo olvidar mis viajes a África, a Marruecos, donde toqué siete años consecutivos ante los reyes de estas tierras. Conocí Estados Unidos, Holanda, Bélgica, España, Alemania, Luxemburgo, Irlanda y Reino Unido, donde mis discos pegaron, como el que hice al lado de Luis Demetrio; otro que gustó en Europa fue el de Martín Urieta».
Arévalo explica que su visita al desaparecido foro El Gran León fue porque los empresarios del Mercado Roma conservaron los cuadros de películas y aniversarios del lugar.
Se sorprendió al verse en una foto al lado de Venus Rey, exdirigente de los músicos, a quien consideró uno de sus más grandes amigos. También “están los cuadros de aniversario de El Gran León. No extraño el lugar, porque se cumplió con la causa de la música y si la vida así me trató al perder la vesícula, la mitad del hígado y una embolia que me dejó secuelas, puedo decir bien hecho, porque eso me hizo más fuerte”.
Agrega que la embolia que le atrofió el oído y el habla no fue pretexto «para que yo tirara la toalla, no recuerdo bien, pero hace 25 años me retiró de los escenarios, pero yo pude más que ella y sigo tocando. Incluso, después de vender este local y ya un poco recuperado, abrí otro foro en la calle de Río Tiber, pero no resultó y ahora tengo la idea de abrir uno más en la Roma. En realidad no recuerdo cuál fue la última canción que toqué aquí”.
Dice no arrepentirse de nada y sentirse complacido de saber que si se retira, lo hará con dignidad.
“No quiero dar lástima al subir a los escenarios, no quiero que la gente me vea acabado y sin fuerzas, así que me doy dos años más para continuar llevando mi música y seguir tocando mis canciones favoritas como Oye Salomé, Caballo viejo y Urge.
Asegura que ha cumplido con todo, incluso con su padre porque por él estudió una carrera corta comercial y obtuvo su título, pero como no ganaba bien con un certificado, «decidí darle a la música y formé mi agrupación, con la que empecé a ganar lo que yo quería; ahora está mi hijo Josué por sacar la discografía que tengo y tomaremos de pretexto el ‘show’ del festejo por 60 años de trayectoria artística que ofreceré en un recinto de la Ciudad de México para promocionarlo».
Precisa que esa noche, el 21 de junio, lo acompañarán en el escenario Susana Zabaleta, Javier Bátiz, Agrupación Cariño, Horacio Franco, Ana Cirré y Rodrigo de la Cadena; “pero antes de esa actuación tocaremos» en otro recinto de la capital del país.