La Sedena revela cómo el crimen trafica armas de EU a México
- Según la Secretaría las armas ingresan como envases de refresco, lavadoras, tanques de gasolina, y hasta simuladas como armas de juguete
México.- El secretario de la Defensa Nacional, el general Luis Cresencio Sandoval, mostró detalles de la forma en la que entran ilegalmente armas a México, desde los Estados Unidos, como envases de refresco, lavadoras, tanques de gasolina, y hasta simuladas como armas de juguete.
A través de imágenes que mostró en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, el general secretario mostró cómo incluso se adecuan partes de automóviles de carga y de pasajeros para meter ahí cartuchos, balas y hasta armas largas.
El primer caso expuesto fue uno asegurado en la aduana de Tijuana, donde se detectaron cartuchos en una botella de refrescos. Y uno en San Emeterio, Sonora, se encontró que la plataforma de un tráiler contenía 55 mil cartuchos de todos los calibres, y además se encontraron 18 armas largas, un arma corta y 12 aditamentos lanzagranadas.
En la aduana de Sonoyta, Sonora, se han encontrado armas y cartuchos debajo de asientos de camiones de pasajeros; y se incautaron dos mil 985 cartuchos ocultos dentro de los acumuladores de un tráiler.
En esa misma aduana se han asegurado cinco mil 694 cartuchos, tres armas cortas, un arma larga y 12 cargadores en un taque de gasolina de una camioneta, y hasta nueve armas largas, 15 cargadores y 15 cartuchos en la cabina del chofer.
Se han detectado hasta mil cartuchos y cinco armas largas en las puertas de automóviles, en la de Nogales, también en los asientos traseros y las llantas de refacción. Incluso se aseguraron tres armas largas dentro de un televisor, en la aduana de Ojinaga, Chihuahua.
En la aduana de Nuevo Laredo, Tamaulipas, se encontraron 100 cartuchos envueltos en un envase de chocolate en polvo; y en Matamoros, tres armas largas dentro de una lavadora.
El general Sandoval detalló que las revisiones se hacen de manera aleatoria, pues si se quisiera hacer a todos los vehículos sel afectarían incluso otras economías, como la de alimentos, pues en las cajas de esos tráiler también se transportan productos perecederos.