En el marco del Día Nacional de Protección Civil, Personal Naval y grupos de reacción de la Secretaría de Marina-Armada de México participan en Macrosimulacro 2019
Ciudad de México.- La Armada de México históricamente ha estado vinculada en labores de Búsqueda, Rescate y Salvamento de la vida humana, de manera especial cuando fenómenos meteorológicos han sorprendido en alta mar a buques mercantes, pesqueros y pescadores ribereños. Sin embargo, las actividades de salvamento de MARINA no sólo se desarrollan en el mar, pues como parte de sus compromisos está el brindar auxilio a la población en casos y zonas de desastre, lo que ha requerido la conformación de grupos activos ante tales situaciones.
Hoy, a más de 30 años del devastador terremoto de 8.1 grados que sacudió a la zona centro del país y dos años después de haber vuelto a sentir la fuerza de la naturaleza, tras los sismos del 7 y 19 de septiembre del 2017, siendo el área más afectada la Ciudad de México, la Secretaría de Marina-Armada de México y sus grupos de reacción participaron en el macrosimulacro que año con año se lleva a cabo con el objetivo de fortalecer la cultura de la autoprotección, considerando la importancia que tienen la prevención y la organización ante este tipo de acontecimientos.
Como parte del protocolo aplicado en la Institución, este día, el personal naval adscrito al Cuartel General del Alto Mando, con sede en la Ciudad de México, participó en la ceremonia de Izado de Bandera en conmemoración de las víctimas de los sismos de septiembre de 1985 y del 2017; posteriormente, durante el macrosimulacro, dio muestra de la capacidad de organización para continuar con las labores propias de cada área y formar los grupos de reacción que actúan para auxiliar a la población civil en casos y zonas de desastre, momento en el que todo el personal de la Secretaría de Marina-Armada de México se concentra en un solo componente: Plan Marina.
El macrosimulacro en las instalaciones de la Secretaría de Marina dio inicio a las 10:00 horas, donde se simuló un sismo de magnitud 8.6 grados en la escala Richter, con epicentro frente a costas del Estado de Oaxaca y sur de Guerrero, con una duración de dos minutos, en donde todo el personal como parte del protocolo identificó lugares seguros dentro de su respectivas áreas de trabajo, y posteriormente al termino de dicho sismo se evacuó el edificio de manera ordenada, y se dirigió a los puntos de reunión, lugar donde se pasó lista de asistencia.
Así mismo como parte del simulacro se recibió del C5 solicitud de apoyo en cinco puntos de la ciudad, procediéndose a dar instrucciones para la organización y distribución de trabajos a los grupos de reacción: Activación del Plan Marina en la Fase de Auxilio a la población civil. A la vez se realizó la evaluación e informe de daños del edificio sede de la SEMAR, para posteriormente proceder el apoyo solicitado por parte de los grupos de reacción.
Es importante recalcar que los grupos de reacción de la Secretaría de Marina-Armada de México están conformados con la finalidad de actuar en casos y zonas de emergencia en los que la ciudadanía se encuentre vulnerable.
Cabe destacar que la misión del Plan Marina es auxiliar a la población civil en casos y zonas de desastre o emergencia, actuando por sí o conjuntamente con el Ejército, Fuerza Aérea y con dependencias federales, estatales, municipales, sector social y privado, con el fin de aminorar el efecto destructivo de agentes perturbadores o calamidades que se presenten en contra de la población y sus propiedades.
En la década de los 40 al incrementarse las actividades marítimo-pesqueras en nuestro país, aumentó el número de casos de accidentes tales como hundimientos, varaduras y encallamientos que requirieron la intervención de los mandos navales para el salvamento de la vida humana en la mar. Lo anterior y el efecto de los fenómenos meteorológicos en la población costera, crearon la necesidad de extender las actividades de protección a los habitantes de los puertos y congregaciones de ambos litorales. Dichas actividades de protección quedaron organizadas a principios de la década de los 50, en lo que desde el inicio recibió el nombre de “Plan de Auxilio a la Población Civil”.
En la Ciudad de México, se creó la brigada de rescate y salvamento en el año de 1970, integrada con vehículos anfibios, equipo de buzos, personal de sanidad, comunicaciones navales, grupos de embarcaciones menores y trabajadoras sociales, la cual tenía como finalidad apoyar a la población civil en el área metropolitana en casos de desastre, principalmente en las colonias aledañas al Distrito Federal, así como en los estados circundantes. Para el año de 1977 citada brigada se desintegró, quedando bajo control de los mandos territoriales en ambos litorales del país.
Posteriormente, a raíz de los sismos de septiembre de 1985, se creó el Sistema Nacional de Protección Civil, que invoca la participación de todas las dependencias del Gobierno, entre ellas La Secretaría de Marina-Armada de México, con el objetivo fundamental de proteger a las personas y a la sociedad ante la eventualidad de un desastre provocado por agentes naturales o humanos, a través de acciones que reduzcan o eliminen la pérdida de vidas humanas y la destrucción de bienes materiales y el daño a la naturaleza.
El Plan Marina esta organizado por fases, en las cuales se brinda el apoyo correspondiente a la población civil, siendo estas las siguientes:
Preparación: se encontrará activa de manera permanente y es mediante la cual se realizan las acciones para reducir riesgos (actualización de planes de auxilio a la población, inventarios de recursos disponibles, se identifican los refugios temporales, entre otros).
Prevención: contempla el conjunto de acciones y mecanismos tendientes a reducir riesgos, así como evitar o disminuir los efectos del impacto destructivo de los fenómenos perturbadores probables o inminentes que puedan afectar la vida y bienes de la población, la planta productiva, los servicios públicos y el medio ambiente.
Auxilio: tiene como finalidad salvaguardar la vida humana, sus bienes, la planta productiva, preservar servicios públicos y el medio ambiente. Se activa al momento que son desplegados el personal naval o unidades para proporcionar cualquier apoyo a la población afectada.
Recuperación: es el proceso orientado a la reconstrucción y mejoramiento del sistema afectado (la población y su entorno), así como a la reducción del riesgo de ocurrencia y la magnitud de los desastres futuros.
Para llevar el auxilio eficaz y oportuno a las zonas donde haya ocurrido un desastre, La Armada de México cuenta con personal y material integrado en unidades aéreas, marítimas y terrestres, algunas de las cuales son unidades altamente especializadas en este tipo de misiones.
De esta manera, la Secretaría de Marina-Armada de México ratifica el compromiso de brindar auxilio a la población civil en casos y zonas de desastre, buscando siempre el bienestar del pueblo mexicano.