Pasar el Día del Padre, en el asilo
- La pérdida de vinculación de las familias, hasta el abandono.
SLP.- En el Instituto Geriátrico Dr. Nicolás Aguilar, la atmósfera del Día del Padre es una mezcla de alegría y melancolía. A pesar del esfuerzo del personal para organizar actividades y celebraciones, la ausencia de visitas familiares deja una marca imborrable en el corazón de muchos residentes.
Existen múltiples razones por las que algunos hijos no visitan a sus padres en los asilos durante la fecha. Entre ellas, la distancia geográfica, compromisos laborales, problemas de salud, y en algunos casos, relaciones familiares fracturadas.
La falta de visitas en un día tan significativo tiene profundo impacto emocional en los padres y abuelos residentes. “Muchos de nuestros abuelos esperan con ansias este día, con la esperanza de ver a sus hijos y nietos”, menciona El Dr. Nazaret López Dávila Director general “Cuando no reciben visitas, puede ser devastador para su estado emocional”.
El personal del asilo y los voluntarios trabajan arduamente para compensar esta ausencia, organizando actividades especiales, proporcionando compañía y ofreciendo apoyo emocional. Tratan de crear un ambiente cálido y familiar, pero son consientes que no pueden encontrar un reemplazo de sus seres queridos.
En este Día del Padre, el Instituto Geriátrico Dr. Nicolás Aguilar llama a la reflexión y a la acción. “Queremos recordar a todos la importancia de mantener los lazos familiares fuertes, especialmente en fechas tan significativas. Una llamada, una carta o una visita pueden hacer una gran diferencia en la vida de nuestros padres y abuelos”, expresa El Dr. Nazaret López Dávila.
Estas fechas nos recuerdan que nunca es tarde para reconectar y fortalecer los lazos familiares. En un mundo que a menudo se mueve demasiado rápido, el Día del Padre nos ofrece una oportunidad para detenernos, reflexionar y recordar la importancia de la familia.
Por: Mario Guerrero
