Empresas de Japón y Taiwán, bajo investigación al considerarse presuntamente implicadas en explosiones de Líbano
Líbano.- Dos empresas tecnológicas, la japonesa Icom y la taiwanesa Gold Apollo, están bajo investigación por su presunta conexión con las explosiones en el Líbano que causaron 37 muertes y más de tres mil heridos. Los ataques han sido atribuidos al grupo chií Hizbulá.
Icom ha iniciado una investigación interna tras la aparición de walkie-talkies con su logotipo en imágenes relacionadas con las explosiones. La compañía, que ha fabricado equipos de comunicación desde 1954, señaló que los dispositivos encontrados podrían ser versiones falsificadas o modelos antiguos, descontinuados hace más de una década.
Los dispositivos en cuestión, del modelo IC-V82, fueron producidos entre 2005 y 2014 y distribuidos globalmente, incluyendo en el Medio Oriente. También se mencionó la posibilidad de que las baterías de los walkie-talkies hayan sido modificadas, lo que pudo influir en los eventos.
En el caso de Gold Apollo, la empresa ha sido señalada debido al uso de buscapersonas con su marca en las explosiones. Gold Apollo, con sede en Taiwán, reveló que los dispositivos fueron producidos por BAC Consulting en Hungría. Sin embargo, esta última negó cualquier participación en su diseño o fabricación.
Además, las autoridades están investigando el papel de Norta Global Ltd, una compañía búlgara que aparentemente importó los dispositivos desde Taiwán. El gobierno taiwanés aseguró que no hay registros de exportaciones directas de Gold Apollo al Líbano y enfatizó que las baterías de estos dispositivos no tienen la capacidad de causar explosiones.
La Fiscalía de Taiwán ha convocado a directivos de Gold Apollo para interrogarles sobre la fabricación de los buscapersonas, mientras que el Ministerio de Defensa taiwanés subrayó que no colabora con Israel en cuestiones de inteligencia, negando especulaciones sobre su relación con la fabricación de los explosivos.