Por su buen comportamiento, Jonathan Watson fue cambiado de una prisión de nivel 3 a una de nivel 2 en Estados Unidos, donde no soportó compartir celda con dos pedófilos y los asesinó, por considerarlos “la peor pesadilla de cualquier padre”.
En 2009, Watson de 41 años fue condenado a cadena perpetua por asesinato, y este año lo cambiaron a una prisión con más libertades, sin embargo, se enojó al saber que compartiría celda con dos pedófilos: David Bobb, de 48 años y Graham De Luis-Conti, de 62 años.
Por lo anterior, el reo hizo una petición urgente para que lo regresaran a la cárcel de máxima seguridad, “antes de que les de una paliza a uno de estos tipos”, dijo, pero el consejero se burló y lo ignoró.
Al regresar a su celda, Watson arremetió contra Bobb al darse cuenta de que estaba viendo programas de televisión para niños, y le preguntó “¿Realmente vas a ver esto delante de nosotros?”, luego tomó un bastón y lo mató a golpes.
Cuando se dirigía a buscar a un custodio para entregarse se encontró a Graham, quien estaba preso por tráfico de menores, y sin pensarlo acabó con su vida tal y como lo hizo con Bobb.
“No podía dormir sin haber hecho lo que todos los instintos me decían que debía hacer en ese momento.”, escribió Watson en una carta que envió al diario The mercury news.
Señaló que se declaró culpable por los asesinatos de los dos pedófilos, y advirtió que lo volverá a hacer cuando tenga a uno cerca.
“Estoy en una posición única donde tengo acceso a este tipo de personas y muy poco que perder, estos individuos son la peor pesadilla de cualquier padre.
“Estas familias pasan años planeando de manera cuidadosa y articulando como darles a sus hijos todas la oportunidades que nunca tuvieron y aparece un monstruo que cambia la trayectoria de ese niño para siempre”, escribió.