- La “Nueva Normalidad” no les favorece”.
SLP.- Representantes de la comunidad de entrenadores y dueños de gimnasios en San Luis Potosí, piden ser considerados en la reanudación de las actividades que dio a conocer el Gobierno Federal para llegar a una “nueva normalidad” tras la pandemia por Covid-19.
De acuerdo con Susana Rodríguez, en San Luis Potosí existen cerca de 250 gimnasios y más de 600 personas que se dedican a la impartición de clases relacionadas a diferentes disciplinas y que dependen de ello.
En ese sentido, hizo la precisión de que las actividades realizadas en un gimnasio no son de esparcimiento sino para mejorar la salud de las personas, pues con ellas se combate la obesidad, los triglicéridos, el colesterol, la ansiedad y el estrés.
“Es muy desgastante, muy preocupante que no nos tomen en cuenta para que nosotros regresemos en la primera fase, esto yo lo veíamos venir desde que empezó, que nos iban a dejar hasta el último. Hemos metido algunos escritos para que nos den la oportunidad de trabajar, sin lugar a dudas somos una fuente de salud, no es posible que abran primero los teatros y los cines que nosotros que somos gimnasios, dependen muchas personas de nosotros”, dijo.
Fue Oscar Morfín Álvarez, quien detalló que los establecimientos de este giro llevan cerrados desde el pasado 23 de marzo; comentó que con el paso del tiempo se dificulta cumplir con las obligaciones de pago.
“Creo que uno de los puntos que yo quiero tocar es que somos de los primeros negocios que cerramos, de hecho el día 23 de este mes cumplimos 8 semanas sin estar laborando y sin percibir ningún solo centavo y seguimos cumpliendo con las obligaciones que tenemos: pago de renta, pago de servicios y algunos otros gastos que tenemos de forma adicional y que son con instituciones financieras; realmente se nos está complicando como para estar aguantando más tiempo”
De acuerdo con Germán Aguilar, las pérdidas que se registran mensualmente son millonarias y afectan a un aproximado de 200 hasta 300 familias.
Los entrevistados afirmaron que en conjunto se trabaja en un protocolo sanitario para garantizar la seguridad y la salud tanto de los clientes como de sus trabajadores, en el que se menciona el reducir el número de personas que ingresan a sus instalaciones; disponer de tallas sanitizadas, gel antibacterial o manejar una agenda para acudir y utilizar sus máquinas.
Por: José Luis Vázquez