SGS.- Don Ángel Cuevas Blanco es un adulto mayor de más de 50 años de edad que trabaja como vigilante en una privada del Fraccionamiento Villas de San Lorenzo en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez y para él no existen los festejos relacionados al Día del Padre.
“Yo soy guardia de aquí de la privada Cerrada de Nápoles, mi nombre es Ángel Cuevas Blanco y me dedico nomás a esto, a cuidar que no entre extraños aquí a la cerrada a registrar los vehículos quién sale quién entra y nada más…Yo llevo 5 años aquí trabajando dando mis rondines y todo eso”, dijo.
Afirma que no solo ese día sino muchos otros que son para festejar, como su cumpleaños, navidad o año nuevo, son días normales en los que tiene que laborar con el objetivo de obtener los ingresos necesarios para él y su familia.
“Ya quisiera que me festejaran pero me toca trabajar, ese día para mi es normal todo. Casi todas las fechas, como mi cumpleaños, por ejemplo que ya es en agosto, pero sigo trabajando igual… A veces me toca trabajar, a veces lo descanso, el año pasado en diciembre gracias a dios me dieron vacaciones y nada más”, explicó.
Negó la posibilidad de una pequeña celebración con su familia pues este próximo Día del Padre sí tiene que trabajar para velar por la seguridad de los vecinos del lugar
“Ese día salgo en la mañana, un día normal para mi porque llego y me duermo y a descansar para regresar en la noche. No creo que haya pastel o algo, festejo no”, declaró.
Por otra parte, señaló que la dinámica de su trabajo ha cambiado con la llegada del virus Covid-19 al estado de San Luis Potosí, pues asegura que el contacto que tiene con la gente en su caso es mayor, pues es quien recibe a los propios residentes, a sus visitas y a las personas que entregan la diferente paquetería que llega a la zona, por ello cumple con las medidas sanitarias establecidas por las autoridades del estado para proteger su integridad y la de su núcleo familiar.
Por: José Luis Vázquez