- Son los sismos más fuertes de los últimos 30 años en la nación, aunque no dejaron víctimas mortales
Albania.- Aumentó a 68 el número de heridos por los dos fuertes sismos que se registraron ayer en Albania, 53 de los cuales fueron atendidos en un Hospital de Traumatología, informó la ministra de Salud, Ogerta Manastirliu.
El presidente albanés Ilir Meta manifestó su pesar por la emergencia y se trasladó a la ciudad de Durrés, la más afectada por los movimientos telúricos de 5.8 y 7.8 en la escala de Richter, registrados con epicentro en el mar Adriático.
Los sismos se registraron a las 14:04 horas, a 13 kilómetros al norte de la ciudad portuaria de Durres, en Kepi i Rodonit, informó el Ministerio de Defensa de Albania, que citó al Instituto de Geociencias, Energía, Agua y Medio Ambiente. Los movimientos telúricos se sintieron principalmente en la costa Oeste de Albania.
Debido a una réplica de magnitud preliminar 5.3, varias personas salieron corriendo de sus casas y apartamentos.
Según testigos en Durrés y la capital, Tirana, el temblor causó daños a viviendas y la interrupción temporal del suministro eléctrico.
El Gobierno de ese país tiene previsto convocar a una reunión de emergencia para analizar la situación y determinar las acciones que deberá tomar para asistir a la población afectada por los sismos.
El viceprimer ministro albanés, Erion Brace, afirmó que todas las instituciones gubernamentales están preparadas para ayudar a los afectados.
“No podemos predecir un terremoto, pero puedo decir que todas las instituciones están en alerta para ayudar a los ciudadanos. El Ministerio de Defensa está listo para hacer frente a cualquier posible emergencia”, sostuvo Brace.
Los sismos de este sábado, los más fuertes que han azotado al país en 30 años, no causaron pérdidas humanas, pero sí grandes daños materiales y pánico entre la población de Durres, Tirana -la capital- y otras ciudades del país.
Por su parte, la ministra de Defensa, Olta Xhacka, indicó que 108 viviendas sufrieron daños y una más se vino abajo a causa de los movimientos telúricos.
Los ayuntamientos abrieron albergues para quienes no pudieran ingresar de nuevo a sus hogares, apuntó.