Hong Kong.- Los enfrentamientos entre manifestantes opositores a la ley de extradición y la policía marcaron este día los festejos por el 22 aniversario de la entrega de Hong Kong a China, con un saldo de 13 policías que fueron trasladados al hospital tras ser rociados con un líquido no identificado.
Los opositores convocados para asistir a las protestas bloquearon las calles cercanas al centro financiero con barras metálicas y tablas de madera, mientras la policía intento dispersar a los jóvenes con gas pimienta antes de la ceremonia de izamiento de bandera por el aniversario de la entrega de Hong Kong al gobierno chino.
Durante los violentos enfrentamientos en las avenidas Lung Wo, Tim Mei y la calle Harcourt alrededor del centro legislativo y administrativo de la ciudad, 13 efectivos de seguridad resultaron heridos al ser salpicados con un líquido no identificado, informó hoy South China Morning Post.
Por la tarde los manifestantes intentaron ingresar al recinto legislativo y rompieron las ventanas por lo que la policía los dispersó con gas pimienta.
La jefa del ejecutivo, Carrie Lam, pronunció un discurso en el Centro de Convenciones y Exhibiciones por el aniversario de la entrega de Hong Kong a China en 1997 en el que reconoció que necesitaba cambiar su estilo de gobierno.
Lam habló sobre la crisis política que enfrenta y que derivó tras el anuncio del proyecto de ley de extradición, por ahora suspendido, y que ha sido rechazado por miles de personas que han salido a las calles para protestar desde hace varias semanas.
El 1 de julio de 1997 se realizó la transferencia de la soberanía de Hong Kong por parte del Reino Unido a China.
En este marco, el ministro del Exterior británico Jeremy Hunt señaló hoy, en el aniversario de la entrega de Hong Kong, el apoyo de Reino Unido a la relación un país, dos sistemas entre el territorio autónomo y China.
Indicó que tras las recientes protestas en Hong Kong era importante reiterar el compromiso del Reino Unido con la Declaración Conjunta Sino-Británica, originalmente acordada en 1984, según publicó The London Economic.
«Es imperativo que el alto grado de autonomía de Hong Kong, y los derechos y libertades del pueblo de Hong Kong, sean plenamente respetados de acuerdo con la Declaración Conjunta y la Ley Básica de Hong Kong», indícó Hunt.
Por su parte, el portavoz del Ministerio del Exterior de China, Geng Shuang, señaló en una rueda de prensa en Beijing que «Gran Bretaña no tiene la llamada responsabilidad de Hong Kong».
«Los asuntos de Hong Kong son puramente un asunto interno de China. Ningún país extranjero tiene derecho a interferir», según un despacho del sitio Channel News Asia.