Pemex prevé inversiones por un billón 773 mil mdp en exploración
México.- El Plan de Negocios de Petróleos Mexicanos (Pemex) contempla requerimientos de inversión por un billón 773 mil millones de pesos en materia de exploración y producción entre 2019 y 2024.
De acuerdo con el documento, para 2019 la empresa espera estabilizar la producción y a partir de 2020 el crecimiento de esta; cuya estrategia permitirá que desde el próximo año registre un crecimiento a una tasa de 9.9 por ciento anual.
“Para 2021 se espera una producción promedio ligeramente arriba de los dos millones de barriles diarios, lo que representaría un crecimiento de 11.1 por ciento respecto a tasa promedio de crecimiento anual estimada para el año anterior”, señala.
Asimismo, el plan de la empresa productiva del Estado señala que, como resultado de la entrada en operación de Ixachi y Xikin, entre otros, la producción de diciembre de 2019 se prevé sea de un millones 829 mil barriles diarios.
Por su parte, la producción de gas natural también refleja la incorporación de nuevos campos, como Ixachi y otros campos de gas no asociado que permitirán, paulatinamente, recuperar los niveles de producción de este energético y alcanzar los casi cinco mil millones de pies cúbicos por día en 2024.
“Con la intensificación de la actividad exploratoria, con inversiones en campos terrestres y aguas someras, se proyecta incrementar el ritmo de la incorporación de reservas 3P y alcanzar niveles por arriba de los mil 500 millones de barriles de petróleo crudo equivalentes, reflejando el enfoque en sustentabilidad”.
Precisa que la variable clave para lograr este escenario es la disponibilidad de recursos de inversión, por lo que Plan se sustenta en la política de apoyo y de soporte federal para el periodo de transición 2019-2020.
“La aportación de capital y la reducción de la tasa del Derecho de Utilidad Compartida permiten a Pemex disponer de recursos financieros para cubrir sus necesidades de inversión. Esta inyección de capital, sumada a la menor carga fiscal permiten reorientar la asignación de recursos en inversiones en exploración y producción de hidrocarburos”.
Estas inversiones resultarán en un incremento en la producción a partir de 2020 y en una tendencia creciente a partir de 2021, con esto prevé que el valor de la producción logre romper la tendencia negativa y a partir de ese año se alcanzan balances financieros positivos, además con el soporte de una mayor producción, el resultado financiero se consolida a partir de 2022.
Según el documento, con el fin de incrementar la incorporación reservas 3P hacia el año 2024 es necesario fortalecer el portafolio de exploración, manteniéndolo diverso y balanceado e incrementar gradualmente las inversiones.
Por lo que contempla incrementar e intensificar la actividad exploratoria en cuencas terrestres, aguas someras y en áreas aledañas a campos en producción; mejorar los programas de evaluación de los nuevos descubrimientos para reducir la incertidumbre en los planes de desarrollo; así como asegurar la visión a largo plazo de oportunidades exploratorias en plays y áreas frontera.
Pemex señala que del total de recursos prospectivos convencionales estimados en las áreas exploratorias, que ascienden a 15.7 miles de millones de barriles de petróleo crudo equivalente, aproximadamente el 90 por ciento requieren estudios exploratorios para convertirlos en prospectos perforables.
Para ello se tiene considerado el siguiente programa de adquisición y procesamiento de información sísmica, insumo fundamental para fortalecer el portafolio de exploración, con una inversión de más de 30 mil millones de pesos.
Asimismo, para poder incrementar la incorporación de reservas, se aumentará la perforación de pozos exploratorios; de 19 terminados en 2018 a 50 en 2019, 60 en 2020 y alcanzar entre 80 y 110 pozos entre el 2021 y 2024.
“A diferencia del periodo del 2011-2018, en el que más del 40 por ciento de la inversión exploratoria se dedicó a aguas profundas, este Plan de Negocios enfoca las inversiones en aguas someras y áreas terrestres en zonas con alta prospección de aceite, gas húmedo y condensado”.
También continuará con los estudios del bloque autóctono de la Plataforma de Córdoba en el occidente de la Cuenca de Veracruz (CV), donde se ubica el campo Ixachi, para identificar y evaluar nuevos prospectos. A nivel Terciario, establecer la continuidad del tren estructural de los campos productores de aceite Bedel, Gasífero y Eltreinta.
Así como valuar el potencial remanente de los bancos oolíticos del Jurásico, así como los carbonatos fracturados de cuenca y de plataforma del Cretácico en la cuenca Tampico-Misantla (CTM) y fortalecer la exploración adyacente a campos cercanos a infraestructura de producción en la CSE, CV y CTM.
“Pemex cuenta con un portafolio de campos en el que alrededor del 80 por ciento ha alcanzado una etapa avanzada de explotación, por lo que se consideran campos maduros, así como otros que requieren de procesos de mantenimiento de presión en etapas tempranas de su explotación. De éstos, casi el 60 por ciento (240 campos) tienen posibilidad de aplicar proyectos de recuperación secundaria y mejorada para incrementar el factor de recuperación”.
La petrolera expone que en el periodo 2020-2023 se tiene en programa iniciar la aplicación de dichos procesos en los campos terrestres con mayor potencial, lo cual permitirá incorporar una reserva 3P adicional de alrededor de 800 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.
Adicionalmente a estas acciones, el incremento en la producción considera la explotación de los yacimientos de Chicontepec, los cuales contienen el 24 por ciento de las reservas totales de Pemex. Debido a su compleja geología, energía limitada y baja permeabilidad, se requiere la aplicación de tecnologías que permitan la explotación rentable.