- Hay otra recompensa de 10 millones a quien informe sobre el paradero de Alejandro Tenescalco, supervisor de la Policía de Iguala
México.- Cinco años después de la desaparición de los 43 estudiantes, el Gobierno de México calificó el caso como una “desaparición forzada” cometida por agentes del Estado. Y activó una millonaria recompensa para dar con los responsables.
Mientras familiares y activistas se alistaban para manifestarse ayer por la tarde, el Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que “no habrá impunidad” en las investigaciones sobre el caso Ayotzinapa. También reiteró que es una prioridad esclarecer los hechos, encontrar a los jóvenes y hacer justicia. “Tenemos una gran ventaja: no hay impunidad. Eso es importante porque cuando se trata de crímenes de Estado es muy difícil llegar a la verdad”, acentuó López Obrador.
El subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, también se refirió al rol del Estado en los hechos bajo el Gobierno del entonces presidente Enrique Peña Nieto (2012-2018). El caso está siendo “reinvestigado” como una “desaparición forzada cometida por agentes del Estado mexicano”.
La noche del 26 de septiembre de 2014, decenas de estudiantes de la escuela rural de Ayotzinapa fueron a Iguala, en el Estado de Guerrero, para apoderarse de autobuses que utilizarían para sus manifestaciones. Pero fueron capturados por los policías coludidos con el cártel de drogas Guerreros Unidos y, desde entonces, se desconoce el paradero de 43 de ellos, en un caso que desató la indignación mundial.
López Obrador, quien llegó al poder en diciembre, creó una Comisión de la Verdad para el caso, mientras la Fiscalía General se comprometió a reiniciar la investigación “casi desde cero”.
A la espera de conocerse el destino de los jóvenes, la justicia mexicana ha liberado a 77 detenidos de la investigación original, entre ellos uno de los cabecillas de Guerreros Unidos, cuyos testimonios fueron obtenidos bajo tortura.
Alejandro Encinas explicó que el Gobierno ofrecerá una recompensa de 1.5 millones de pesos a quien proporcione información “fidedigna y verificable” del paradero de los estudiantes. Una segunda recompensa de 10 millones de pesos será otorgada a quien informe sobre el paradero de Alejandro Tenescalco, supervisor de la Policía de Iguala y uno de los principales señalados en el caso.
El fiscal especial, Omar Gómez, adelantó que la próxima semana citarán a exfuncionarios federales relacionados con la cuestionada investigación original, como el exprocurador Jesús Murillo Karam. Aseguró que, de ser necesario, Peña Nieto también sería llamado a declarar. “La única verdad es que no hay, hasta ahora, verdad alguna”, enfatizó Encinas.
Durante la conferencia de ayer, López Obrador y demás funcionarios portaron una camiseta con la leyenda “Ayotzinapa, 5 años; yo por la verdad”.