San Salvador.- El nuevo presidente de El Salvador, Nayib Bukele, rindió protesta constitucional ante el Congreso, donde prometió instalar una Comisión Internacional contra la Impunidad en El Salvador, anunció un gabinete con paridad de género y notificó que invertirá en «megaproyectos».
Ante el pleno parlamentario, Bukele recibió la banda presidencial de manos del presidente de la Asamblea Legislativa de El Salvador, Norman Quijano, y ofreció su primer discurso como mandatario, en el que resaltó sus llamados a superar la polarización social y política, y a integrar a migrantes, mujeres y discapacitados.
“Quiero hacer una mención especial para los invitados ilustres que tenemos este día. Me refiero a uno y cada uno de los salvadoreños que nos acompañan aquí”, dijo Bukele, quien ha resaltado su distancia con los partidos tradicionales y ofrecido un mandato diferente, con énfasis en la lucha contra la corrupción.
“Hace cuatro meses nos comprometimos a pasar la página de la posguerra. Hoy vine para cumplir esa promesa”, señaló, y ofreció que “este día inicia el nuevo gobierno de El Salvador. Este día inicia la nueva historia que vamos a escribir juntos”, según reportó el diario en línea El Faro.
Bukele, político y empresario de 37 años, ganó las elecciones en febrero pasado con 53 por ciento de los votos bajo la bandera de la Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), sobre la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y el izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
El exintegrante del FMLN y exalcalde del municipio de Nuevo Cuscastlán -13 kilómetros al suroeste de San Salvador-, y de la capital salvadoreña sustituye a partir de este sábado en la presidencia al excomandante guerrillero Salvador Sánchez Cerén.
“A partir de hoy no seré el presidente de un solo sector ni mucho menos de un partido político. Seré el presidente de los siete millones de salvadoreños que viven acá y los tres millones que viven afuera”, dijo en referencia a la extensa comunidad salvadoreña que vive en el exterior, en especial en Estados Unidos.
Bukele saludó en lenguaje de señas a las personas con necesidades especiales, al apuntar que “de ahora en adelante el poder está en todos nosotros, en las manos de nuestros agricultores, profesionales, estudiantes, escritores, artistas, pescadores, amas de casa. Y de nuestras personas con discapacidad”.
Aseveró que “por primera vez en nuestro país tendremos un gabinete de igual número de mujeres que de hombres. Pero no han sido seleccionados por su género. Han sido seleccionados por sus capacidades”.
El nuevo mandatario anunció que su gobierno invertirá en megaproyectos, un tema sensible por los conflictos en torno a la minería metálica, a la que se oponen comunidades campesinas, y que el anterior gobierno del FMLN prohibió.
Al cerrar su discurso, Bukele invitó a la concurrencia a un nuevo juramento, para “defender lo conquistado el 3 de febrero (día de su triunfo electoral). Juramos que cambiaremos nuestro país contra todo obstáculo, contra todo enemigo, contra toda barrera, contra todo muro”.