La UE pide investigar ataque a campo de desplazados en Siria
- Federica Mogherini reitera la posición del bloque de que todos los autores de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad deben «rendir cuentas»
Siria.- La Unión Europea (UE) pidió este viernes investigar el ataque del pasado miércoles en el que se lanzaron misiles contra un campamento de desplazados y que causó una quincena de muertos y decenas de heridos en el noroeste de Siria.
«Estos y otros ataques deberían ser investigados en profundidad por la Comisión de Investigación de la ONU para el noroeste de Siria, que comenzó su trabajo el 30 de septiembre de 2019», declaró en un comunicado la alta representante de la Unión para Asuntos Exteriores, Federica Mogherini.
Mogherini reiteró la posición de la UE de que todos los autores de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad deben «rendir cuentas».
«Aunque la Unión Europea reconoce la presencia de organizaciones terroristas designadas por la ONU en la región, ataques indiscriminados sobre infraestructuras civiles críticas, incluidas instalaciones de sanidad y educación, por parte del régimen sirio y sus aliados son inaceptables y deben detenerse inmediatamente», añadió la política italiana.
Insistió en que todas las partes del conflicto sirio deben respetar el derecho internacional humanitario y las leyes internacionales sobre derechos humanos, así como garantizar el acceso de la ayuda humanitaria a las personas que la necesitan.
Además, consideró el ataque contra el campamento de desplazados «otra deplorable escalada» en la situación en el noroeste de Siria, que según dijo Mogherini, «se está deteriorando».
Afirmó que la violencia amenaza con «menoscabar» las conversaciones entre el Gobierno, la oposición y representantes de la sociedad civil para redactar una nueva Constitución que se deben reanudar en Ginebra la próxima semana bajo los auspicios del enviado especial de la ONU, Geir Pedersen.
El pasado miércoles tuvo lugar un ataque de las fuerzas sirias a un campo de desplazados de Qah, situado cerca de un hospital materno-infantil en el noroeste de Siria, junto a la frontera turca.
