México.- El cantante mexicano Pedro Kóminik considera que la música que pertenece a la década de los años 50 tuvo una sensibilidad especial para amalgamar a una sociedad fragmentada y es, por lo mismo, música muy gozosa, bastante divertida.
Para el artista originario de la Ciudad de México, los 50 fue una época muy importante, pues su padre, quien nació en Austria, fue refugiado de la Segunda Guerra Mundial y llegó a México en ese entonces.
“Fue ese gran momento en el que todo el planeta se reponía de la guerra, de la polarización, es muy claro que en Alemania había familias en donde algunos hermanos apoyaban a los nazis y otros a los refugiados, se ha visto mucho en el cine”, dijo.
Durante mucho tiempo Kóminik se ha dedicado a hacer sátira política tanto en sus espectáculos en teatro, como en televisión, y durante este tiempo se ha dado cuenta que una labor fundamental del artista es conciliar al público, para que “todos nos subamos al mismo barco”.
El intérprete, quien ofrece su espectáculo musical Los 50’s por un quinto, considera que hoy en día la música de la citada década, no es que esté olvidada por los músicos contemporáneos, sino que más bien tiene un grado de dificultad que simplemente muchos “no lo agarran, porque no les da”.
Subraya que tienes que ser vocalista para hacerla sonar, pues son melodías que requieren de mucho rango vocal y compromiso en la interpretación.
La música está hecha, dijo, no para generar muchos “likes” en YouTube, sino para hacerla propia y vivir la experiencia en vivo, para que el cantante “te salpique de sudor, sientas su aliento y la cosquilla en la panza de alguien mirándote a los ojos, no a una cámara”.
Él procura hacer sus shows como se realizaba en la época de Pedro Vargas, de María Victoria, de Frank Sinatra, bajándose a las mesas a cantarles a los asistentes casi casi a dos centímetros de distancia.