- Empresas pueden acceder a equipo y herramientas sin que merme su flujo de capital
México.- Analistas de entidades privadas como calificadores internacionales y el Fondo Monetario Internacional (FMI) coincidieron que el crecimiento económico del país se encuentra estancado y los planes de desarrollo e inversión caminan lento.
Ante este panorama para los empresarios y emprendedores, el académico de la Universidad Panamericana, sede Guadalajara, Marco Antonio Fregoso González, recomienda voltear a los esquemas de arrendamiento como forma de financiamiento. “En México el modelo de arrendamiento está presente desde 1981. Hoy se encuentra en la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito en su artículo 408. Su reglamentación abrió la posibilidad para que los empresarios y emprendedores al final del contrato puedan adquirir los bienes arrendados y tener algunos beneficios fiscales”.
La menor disposición de financiamiento por parte de la Banca de Desarrollo del Gobierno es una oportunidad para el esquema de arrendamiento. Fregoso González indica que los empresarios, emprendedores y comerciantes desconocen todo el paquete de beneficios que ofrecen los distintos esquemas de arrendamiento puro. También explica que la cultura para hacer negocios está basada en adquirir bienes mediante créditos directos: “Se tiene la costumbre de tener una deuda para sentirse dueños de manera completa del bien, pero poco se analiza si esa opción es la indicada para la empresa y el modelo de negocio”.
En este sentido, la caída de los ingresos y el bajo crecimiento también representan una necesidad para que los gobiernos encuentren otras opciones de financiamiento para cumplir con los compromisos que tienen con la sociedad.
Sin embargo, añade el académico: “El esquema de arrendamiento ofrece oportunidades para quien opta por su uso, un ejemplo es que no pierde capital por la compra de un bien, fiscalmente genera una factura por el tiempo que dura el contrato y se convierte en un gasto fijo, de la manera tradicional es solo una factura la que se puede deducir. Al hacer el cálculo fiscal y contable, es la mejor propuesta el financiamiento. Además, dependiendo del tipo de contrato, al final se puede renovar, adquirir el bien con un costo menor o participar de la venta del mismo a precio de mercado y obtener una ganancia. Estos programas también funcionan para instituciones públicas y de Gobierno”.
El crecimiento de este esquema de arrendamiento ha tenido como resultado en México la creación de las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Sofomes) que están reguladas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef). La Asociación de Sociedades Financieras de Objeto Múltiple en México, A.C. (Asofom) estima que su participación en el mercado crediticio del país es de 5.6%, lo que representa un capital de más de 520 mil millones de pesos, que operan alrededor de mil 400 compañías de manera legal.
Tipos de arrendamiento
Puro: Es la renta de un bien o servicio con pagos mensuales, esta renta es deducible del ISR y el IVA, acreditable al 100 por ciento.
Financiero: Es la adquisición de bien. Se paga una renta mensual, al final del contrato se puede comprar activo con un precio residual, negociar con un tercero a precio de mercado o devolver el bien e iniciar un nuevo contrato.